
Todas las
personas piensan y actúan distinto, pero seguramente todos ustedes ya se han
dado cuenta de que hay ciertas cosas que ya están aburridos de seguir haciendo
cuando van cumpliendo una cierta edad. Esto es lo que a mí ya no me interesa
seguir haciendo y espero que se sientan identificados:
1. Callarme
Con los años he
aprendido a no callarme ante las injusticias y a decir lo que me plazca (con
respeto por supuesto). Cuando era más joven solía dejar pasar algunas cosas que
ahora no.
2. Preocuparme de
cómo luzco ante los demás
Antes me
preocupaba mucho de ir bien vestida a ciertos lugares porque sabía que si no lo
hacía habría gente que me juzgaría. Hoy no me importa. Si un día quiero ir a
tomar desayuno con una amiga, me pondré lo que me sienta más cómodo aunque eso
no sea parte de la última tendencia de la moda.
3. Placeres
culpables
Me he dado cuenta
de que me aburrí de tener que elegir cosas como por ejemplo el estilo de
música, series o películas que la mayoría prefiere. Si a mí me gusta una
cantante que no es la predilecta de muchos, no me importa y gritaré a los
cuatro vientos que a mí me encanta.
4. Zapatos
incómodos
En esta etapa de
mi vida prefiero usar zapatos cómodos antes que lucir los que están de moda si
es que son incómodos. Y tampoco me importa si mis calcetines combinan mucho con
mi vestuario.
5. Dar
explicaciones por el desorden de mi casa
¿Sabes por qué mi
casa está desordenada? Porque hoy día no tuve ganas de ordenar ni limpiar. Punto.
6. Acumular cosas
que no necesito
Casi todo lo que
he ido acumulando no es necesario. Hoy no compro por comprar y me deshago de lo
que no uso ni necesito. ¡Se siente tan bien!
7. Pasar tiempo
innecesario con personas que no son de mi agrado
La vida es
demasiado corta para estar compartiendo mi tiempo con personas que no me
agradan. Si antes me sentía presionada a ir a ese almuerzo semanal con mis
compañeras de trabajo (que no tenemos nada en común ni nos llevamos bien),
ahora simplemente no voy,
8. Buscar el lado
bueno en cada persona que conozco
En la vida he
aprendido que no todas las personas son buenas. Y cada uno toma sus propias
decisiones. Si alguien elige ser un idiota, ya no me siento obligada a
encontrarle su lado bueno. Sólo seguiré adelante y pasaré de ellos de la manera
más rápida y menos dolorosa posible.
Natacha Santos
Gracias por compartirlo en tu blog...abrazos
ResponderBorrar